El mercado de atún tropical es un mercado internacional en el que intervienen muchas flotas que capturan principalmente las variedades de atún listado (Katsuwonus pelamis), rabil (Thunnus albacares) y patudo ( Thunnus obesus). El atún es uno de los productos con mayor demanda mundial por parte de los consumidores, y los mercados del mundo se nutren de una gran variedad de flotas, cuyos estándares de explotación son muy dispares y muchas veces están muy por debajo de lo deseable.
Desde la aprobación y entrada en vigor de la UNE 195006 Atún de Pesca Responsable de buques atuneros cerqueros congeladores, los consumidores tienen un nuevo estándar de sostenibilidad social y pesca responsable que abarca diferentes ámbitos respecto de su actividad: condiciones sociales, seguridad marítima, control de la actividad pesquera, condiciones sanitarias, etc…
La norma UNE 195006 y las buenas prácticas en pesca responsable
Los buques certificados bajo esta norma se diferencian de otros actores de este sector de la pesca al promover de manera voluntaria la utilización de las buenas prácticas en pesca responsable recogidas en la norma UNE 195006.
La certificación del cumplimiento de la norma se basa en un sistema de control interno con dos niveles de actuación, a bordo, mediante observadores que verifiquen el cumplimiento, en todos los océanos (Atlántico, Índico y Pacífico). En tierra a través de un órgano de control que coordina la labor de los observadores y gestiona el volcado de información a una base de datos.
Respecto a los dispositivos de agregación de peces comúnmente empleados en este tipo de pesca (FADs, por sus siglas en inglés), deben estar diseñados y construidos con materiales que generen el menor impacto ambiental al ecosistema marino en caso de pérdida y eviten o reduzcan el enmalle accidental de animales acuáticos como tortugas, tiburones, mantas y rayas. Para cada una de estas especies se ha diseñado, además, un protocolo de actuación en caso de ser atrapados accidentalmente, adaptado a las características biológicas de cada especie, para evitar causar daños a los animales al mismo tiempo que se mantiene la seguridad de la tripulación en las maniobras de liberación para maximizar su supervivencia.
Como ejemplo, para el caso de las tortugas marinas, estas deben desmallarse lo antes posible de la red y ante todo se debe evitar que la tortuga pase por el hablador para ello se para la maniobra de manera inmediata en el momento de detectar una tortuga, además se debe manipular cogiéndola por el caparazón y evitando agarrarla por las pata, incluso si las tortugas sufren algún tipo de daño debe ser retenidas a bordo en condiciones de sombra y húmeda hasta su recuperación para poder soltarlos al mar.
Finalmente se deben cumplimentar además unos registros de información relativos al uso de los FADs, (número, materiales, nombre del buque, posición, fechas…), también se registra la información relativa a las maniobras de liberación en caso de haberlas y el estado del animal en ese momento. Todos estos registros se vuelcan en una base de datos informatizada con el fin de agilizar la gestión y control.
Por último y no menos importante destaca el hecho de la formación que el patrón y el capitán de buque deben recibir sobre el estado de los recursos pesqueros y las mejores prácticas que de ellos esperan incluyendo las buenas prácticas de esta norma, además de estar sensibilizados sobre los potenciales impactos que la actividad pesquera pueda ocasionar en el ecosistema marino.
Todas estas buenas prácticas hacen de los buques certificados mediante la UNE 195006 referentes a nivel internacional al tiempo que garantizan al consumidor prácticas de pesca responsable.